Thursday, December 13, 2007

Los Amores Perros de Michael Vick

Los Amores Perros de Michael Vick

Por Domingo Noriega

Antes que nada permítanme presentarles mi reino animal. Mantengo desde hace años un buen grupo de peces tropicales, seis tortugas, un perro y hasta hace poco un adorado gato que vivió 18 años y el momento de ‘ponerlo a dormir’ como eufemísticamente le decimos a terminar la vida de nuestras mascotas, fue uno de los momentos mas tristes de mi vida. Salvo una que otra infeliz lagartija durante mi niñez, ni cazo, ni pesco y me considero incapaz de matar una mosca. Con esto quiero decir que soy un defensor de los animales y opuesto a su abuso.

Después de este preámbulo necesario, vengo al tema: A Michael Vick, el quarterback de los Atlanta Falcons, de raza negra y uno de los mas espectaculares jugadores de la NFL, lo han sentenciado a dos años de cárcel por su responsabilidad en organizar y financiar peleas de perros, los cuales eran después sacrificados si no rendían lo suficiente. Definitivamente este fue un ‘pasatiempo’ (si podemos llamarlo de alguna manera) en el que Vick participó al parecer de manera mucha mas activa de lo que inicialmente había admitido. Demás esta decir que este atleta ha defraudado a millones de niños y jóvenes (y otros no tan jóvenes) para los que constituía un ídolo.

Aun así, considero la sentencia excesiva, abusiva y también (con el perdón de algunos fariseos en la PETA y otras organizaciones similares) un tanto absurdas e hipócritas las múltiples rajaduras de vestiduras sobre el caso. Tal pareciera que Vick es un asesino múltiple, un violador de bebitos, o un ladrón de ancianas desvalidas, cuando en realidad todo en este mundo relativo y su ‘crimen’ lo es solo en dependencia de la manera en que la sociedad defina lo que es legal y lo que no lo es.

Por ejemplo, que me dicen de lo que hacen allá, en la supuestamente civilizada España, a los toros? Esas corridas pudieran considerarse como un abuso animal mucho peor que cualquier pelea de perros, sin embargo a los toreros los reverencian tal si fueran héroes. Hace unos meses, de vacaciones por España, mas por curiosidad que otra cosa llevé a la familia a uno de estos espectáculos en la Maestranza de Sevilla…y nada mas parecido a una carnicería y tortura de animales nobles y bravíos ante una turba cada vez mas enardecida mientras mas sangre ve correr y mas banderillazos clavar…

Y de las peleas de gallos qué? Las corridas de toros no ‘prendieron’ en el Caribe, pero las peleas de gallos son parte de nuestro acervo cultural, todavía perfectamente legales en Puerto Rico, es mas, una de las principales atracciones en Isla Verde, en el corazón turístico de San Juan es un club gallístico siempre lleno de norteamericanos! Bueno, pues los gallitos perdedores tampoco la pasan muy bien en esas peleas.

Y ya, para terminar, me gustaría que cada uno de esos que tanto critican y hacen pedazos a Vick, incluido el señor juez que lo sentenció, se siente a su mesa y contemplen con detenimiento lo que comen. A no ser que sean vegetarianos, están consumiendo un animal, llámese pollo, vaca, cerdo o lo que sea, que lo más probable que haya pasado la vida en un espacio cerrado, pisoteando estiércol, para terminar su miserable vida en un matadero.

En fin, que aun a sabiendas de que las leyes son las leyes y hay que cumplirlas, no puedo evitar de pensar que el ensañamiento con el jugador de Atlanta pudiese tener subterfugios raciales. Es como si la sociedad, de manera subliminal, con este masivo acto de repudio estuviera como poniendo a Vick en su lugar, ya que tuvo el ‘atrevimiento’ de ser negro y a la vez uno de los mejores quarterbacks de la liga, o sea, la cabeza pensante del equipo, algo a los que todavía algunos trogloditas que viven en el pasado no pueden admitir. Ojala y que la cárcel no convierta al numero 7 de los Falcons en un peor ser humano, (como le sucedió al boxeador Mike Tyson) sino que salga de ella todavía con los deseos, el talento y la fuerza para jugar football.